lunes, 5 de julio de 2010
Despedida
“…. Si un día tiene que elegir entre el mundo y el amor…. Acuérdese: si elige el mundo se quedará sin el amor, pero si elige el amor, con él conquistará el mundo!...”
Albert Einstein.
¡Lo más triste no es despedirse,
sino no saber hacia donde ir….!
¡ Y lo más triste no es despedir al que parte,
sino no saber donde y para qué te quedas…!
Si toda la vida es un camino,
y toda la vida es una búsqueda,
acéptalo, aunque te duela,
toda la vida es una despedida.
¡Y sólo aprendiste a vivir,
cuando aprendiste a despedirte!
Y no habrás aprendido a caminar en libertad, buscando lo no alcanzado,
mientras no te hayas despedido de lo andado y logrado.
La libertad y la valentía que no tienes para despedirte de todo lo dejado y lo perdido,
son la libertad y la fuerza que te faltan para seguir andando.
Despídete de los padres que ya no necesitas (pero no los olvides),
y cuida de ti mismo haciéndote responsable de tu vida.
Despídete, de los hijos que ya no te necesitan (pero no los olvides),
y déjalos ser libres.
Despídete, de lo bueno que viviste,
sin apegarte al tiempo que pasó,
por temor del presente y del futuro.
Despídete, del mal que cometiste,
sin atarte con culpas y reproches;
perdónate a ti mismo.
Despídete, de las ofensas que te hirieron,
sin esclavizarte en la prisión del rencor y la amargura.
Despídete, de los que muriéndose, partieron,
para que dejes de esperar su regreso,
y camines tu camino en la esperanza,
de encontrarte tu con ellos
Despídete, deja correr el río de la vida,
llevándose las aguas que estás viendo,
para que tengan un lugar ante tus ojos,
las aguas que no viste todavía,
y ya están viniendo.
……Rene Trosero.
De una despedida, mi corazón siempre se afecta,
No es fácil la partida y mucho menos la permanencia del que se queda.
Decir adiós, es morir un poco, cuando la persona o el espacio dejado, nos llenan el alma.
Es atesorar vivencias, conocimientos y valores,,
Una mirada, un aroma, un suspiro, una flor, siempre son la vuelta al recuerdo,
la añoranza de lo perdido o simplemente, el estar o no haber estado.
He despedido a mis padres,
algunos amigos,
mi infancia y pubertad,
mi adultez me está dejando…..,
¡Bienvenida la ancianidad!
Al llegar encontré padres, hermanos y familia,
Un tesoro que guardo en lo profundo de mi alma.
Seguí por el camino donde me llevó la vida,
allí me topé con personas que me llenaron de vida,
fui caminando, lejos, despacio…… y tú, estabas en la vía.
Nos reconocimos……,
nos amamos y continuamos unidos.
Ser tu amante,
ser tu hermana,
ser tu amiga,
ser tu madre,
Son la dicha del momento,
son…. ¡la vida!.
Seguiré con el tiempo,
en el camino trazado,
despacio,
con prisa, pero sin pausa,
Dios será, el que en el momento,
me llamará a su lado,
pero ahora….,
en este instante…,
mi Adiós......,
no ha llegado.
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